Publicado por: Paúl Miguel Ortega González, en Mar 17, 2021
Tras darle algunas vueltas al concepto, creo que podríamos definir la fotografía artística como aquella que busca evocar en el espectador, de forma consciente, una sensación o un sentimiento concretos. No busca representar la realidad simple que tenemos ante los ojos, sino aquello que el fotógrafo interpreta de esta realidad. Es decir, la fotografía no se toma sino que se crea con una intención artística.
Si el mundo visual fuera sencillo y tuviera las barreras bien definidas, podríamos decir que lo opuesto a la fotografía artística es el fotoperiodismo que busca mostrar la realidad de la forma más objetiva posible. No obstante, como seguro que sabes ya, la objetividad en fotografía no existe, y muchos fotoperiodistas mezclan la simple imagen de la representación de la realidad, con composiciones artísticas.
No va a haber, probablemente, ninguna respuesta cerrada en este artículo, porque en arte nunca hay respuestas cerradas. Todo depende de millones de factores, percepciones personales, momento histórico, contexto social y de la habilidad o sensibilidad natural de cada uno.
Lo que debes tener claro para empezar, es la intencionalidad artística de tu trabajo. Es decir, hay que pensar qué queremos transmitir con nuestra imagen, la tienes que sentir, analizar, imaginar, realizar los ajustes que necesites para conseguirlo y, por último, hacer la foto.
A medida que te dejes llevar por tu lado más artístico, te darás cuenta de cómo el conocimiento de tu cámara junto con los conocimientos del triángulo de exposición (entre otros) te servirán para plasmar tus ideas con buenos resultados.
Resumiendo: la cámara debe estar al servicio del fotógrafo, al tuyo, como un pincel está al servicio de un pintor. Es decir, sólo es una herramienta para lograr tu objetivo.
No es necesaria una larga exposición, un Lightpainting o recurrir a Photoshop para conseguir una fotografía artística. Una simple composición, una profundidad de campo reducida, una sombra en un rostro… no necesitas nada más que tu imaginación. De todo se puede conseguir una versión artística y una versión normal ;-).
Dicho esto sí que es cierto que existen multitud de técnicas e ideas que pueden ayudarte a conseguir tus objetivos artísticos. Estas son las que se me ocurren a mí:
Ya te lo he avanzado antes. La composición de una escena aparentemente sencilla puede llevarte a una imagen puramente artística. Siempre te invitamos a variar el punto de vista para que te enfrentes a un maravilloso y diferente mundo, para que transmitas con mayor potencia visual aquello que quieres transmitir, para que, en definitiva, entrenes tu mirada y potencies tu creatividad.
La perspectiva, aprender a romper las reglas de composición cuando proceda, conocer y trabajar las líneas, los puntos de fuga, y, en general, cuanto más conozcas y domines la composición de las imágenes más herramientas creativas tendrás en tu poder :-).
Trabaja la composición
A mí me chifla, no te voy a engañar ;-), me tiene ganada su magia, su esencia, su atemporalidad y abstracción. El blanco y negro es simplificación, es forma, es contraste, es luz y sombra en su sentido más estricto, es lo más sencillo y, a la vez lo más complejo… Vamos, que si nunca has intentado fotografiar en blanco y negro, te animo a que lo intentes (y no, no me llevo comisión en ningún lado jejeje, es que me gusta de verdad
).
Blanco y negro
Y así como el blanco y negro me chifla pues, el color también ;-). El color tiene muchísima fuerza visual y trabajarlo conociendo sus efectos en el espectador, la forma en que contrastan unos colores con otros (por ejemplo los colores complementarios), cómo son capaces de acercarse o alejarse dependiendo de si su tono es frío (los tonos fríos parecen alejarse) o cálido (los tonos cálidos parecen acercarse), ofrece resultados espectaculares. Aquí tienes 20 formas de utilizarlo creativamente en tus fotografías.
Antes de continuar, una cosa rápida que te podría interesar: acabamos de lanzar FOTOGRAFÍA SIN SALIR DE CASA, un nuevo formato digital con el que ponemos a tu disposición 101 ejercicios de fotografía que podrás practicar desde la comodidad de tu casa. Ahora que estamos de confinamientos y con esta situación un poco rara, quizás quieras echarle un vistazo.
Dicho esto, volvemos al asunto...
TEXTURAS
Textura es sinónimo de información táctil. Es decir, cuando vemos una textura en una imagen, automáticamente imaginamos cómo es el tacto frío, caliente, rugoso, fino, suave, áspero… Es un tipo de información que puede funcionar por sí solo, y una herramienta creativa más para utilizar en tus fotografías artísticas.
La fotografía macro no es sólo “la foto de un bicho”, es mucho más. Es la posibilidad de adentrarte en un mundo mágico y desconocido de texturas, desenfoque, ampliaciones, colores y abstracción.
Hay gente que pone váteres en museos (véase Duchamp) para reivindicar la importancia que tiene el contexto de la obra, y otros que no tenemos la suerte de exponer en Nueva York, pero que conocemos la importancia del contexto de una escena y cómo ésta puede cambiar radicalmente al moverla de su entorno habitual. Algo tan sencillo como sacar un pez del mar y plantarlo en tu estantería como un libro más sería (a parte de desaconsejable), un ejemplo de descontextualización.
No toda fotografía artística es surrealista, pero diría que todas las surrealistas son artísticas o por lo menos están hechas con intención artística. No necesitas grandes infraestructuras o equipo para lograrlas. Con algo de imaginación puedes conseguir muchas de ellas. Aquí tienes 10 formas de conseguir fotografía surrealista.
Los reflejos en superficies en movimiento (agua) o en superficies estáticas (como espejos, cristales…) te permitirán jugar con la simetría y la asimetría, con el equilibrio o la falta de él, o con la posibilidad de engañar al ojo y obligar a tu espectador a mirar dos veces tu imagen.
Reflejos
Las sombras son otra herramienta muy útil y con mucha fuerza visual, que te permitirá conseguir composiciones más abstractas y formales.
Los contraluces te permitirán trabajar tu lado más artístico, podrás realzar el perfil de los elementos, para llevarla a su forma más simple, más pura y esencial.